Setas en conserva
Las setas en conserva son una opción culinaria que cada vez es más demandada por ser fácil de preparar, ser una alternativa muy versátil y deliciosa de consumir.
Las setas en conserva es un método de almacenamiento, que nos permite disfrutar de la riqueza y sabor de las setas en cualquier momento del año. Si eres de los que no suelen consumir setas en conserva porque piensas que son menos saludables o no sabes como prepararlas o donde encontrarlas, aquí encontrarás todas las respuestas y harán que se conviertan en un básico de tu despensa.
En este post, haremos una especie de guía sobre las setas en conserva, indagaremos la forma de prepararlas, compararemos las setas en conserva con las naturales y deshidratadas, conoceremos sus beneficios nutricionales y cómo no, te compartiremos recetas fáciles y rápidas de elaborar, para que las setas en conserva se conviertan en un elemento imprescindible en tu día a día.
¿Quieres adentrarte en este mundillo? ¡Pues vamos allá!
Setas en conserva. Preparación.
A la hora de llevar a cabo la preparación de setas en conserva, en Gabemar seguimos unas técnicas muy meticulosas para asegurarnos de que su sabor y textura no se vean dañadas.
El primer paso: seleccionar materia prima de calidad. En Gabemar somos unos afortunados, ya que, al vivir en Fradellos, estamos rodeados por unos impresionantes bosques mediterráneos en donde crecen robustas encinas y riberas. Estos árboles, ayudan a conseguir un hábitat idóneo para la micología. Estas condiciones que se dan, son gracias a nuestra localización en Zamora, concretamente en la comarca de Aliste.
Una vez que hemos recogido los ejemplares deseados, las limpiamos cuidadosamente para eliminar cualquier residuo de tierra o pequeños insectos. Al mismo tiempo, comprobamos el tipo de seta que es y las vamos clasificando.
Para una limpieza completa, las solemos dejar en remojo un par de horas y luego las secamos suavemente con un paño de algodón.
Con los hongos ya limpios, pasamos al segundo paso: córtalas en el tamaño deseado.
A continuación, para mantener su textura y eliminar cualquier microorganismo no deseado, realizamos un escaldado rápido. Colocamos en una olla agua y sal. Cuando alcance el punto de ebullición, incorporamos las setas y las dejamos en la mezcla durante un par de minutos.
Cuando haya transcurrido el tiempo preciso, vertimos el contenido de la olla en un escurridor y las remojamos con agua muy fría para detener la cocción.
Finalmente, nuestras setas ya en sus correspondientes envases (tarros o latas), son bañadas en una mezcla artesanal sin aditivos ni conservantes artificiales a base de: agua, sal, ácido cítrico y ácido ascórbico.
En cada uno de los envases, se incluye una etiqueta con su correspondiente fecha de preparación, ingredientes de conservación y especies de setas que contiene.
Y así, es cómo elaboramos nuestras setas de conservas en Gabemar de una forma 100% natural, sin aditivos ni conservantes artificiales.
¿Qué te parece?
Beneficios de las setas en conserva.
Si eres un seguidor de nuestro contenido, sabrás que las setas no solo destacan por su exquisito sabor, sino también por ser consideradas superalimentos ricos en nutrientes esenciales. A pesar de su naturaleza estacional, en Gabemar hemos encontrado la solución: durante los meses sin setas frescas, elaboramos conservas, harinas, setas deshidratadas o congeladas para que puedas disfrutar de este manjar codiciado los 365 días del año.
Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, persiste la idea errónea de que las setas en conserva están llenas de conservantes y carecen de beneficios nutricionales. Teoría que como has podido leer en el apartado anterior, no es cierta. Las setas en conserva, al igual que las setas frescas, ofrecen numerosos beneficios. Son ricas en fibra y contienen vitaminas y minerales con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, contribuyendo a la salud del sistema inmunológico y causando efectos positivos en la salud cardiovascular.
Además, el proceso de conservación que aplicamos en Gabemar no solo no afecta negativamente a sus propiedades nutricionales, sino que las potencia, convirtiéndolas en una opción saludable y disponible en cualquier momento.
Setas en conserva o setas frescas.
Aunque las setas frescas tienen su encanto, las setas en conserva están ganando terreno en la gastronomía gracias a sus numerosas ventajas. Son ideales cuando las setas frescas no están disponibles, permitiendo disfrutar de platos deliciosos sin depender de factores climáticos o geográficos. La demanda creciente, incluso durante la temporada de setas frescas, se debe a su ahorro de tiempo; no requieren limpieza ni preparación previa más allá de abrir el bote o la lata.
Asimismo, tienen una vida útil más larga y son fáciles de almacenar en la despensa para tenerlas siempre a mano y sacarte de un apuro cundo vas a contrarreloj o simplemente no sabes qué preparar o no te manejas bien en la cocina.
Y para concluir, también son la opción más acertada si buscas ahorrar en la cesta de la compra sin tener que optar por productos de menor calidad.
Setas en conserva o setas deshidratadas.
Las setas deshidratadas son otra opción popular, pero difieren en sabor y textura de las setas en conserva. Mientras las deshidratadas necesitan remojo, las que están en conserva están ya están listas para usar. Ambas comparten una larga vida útil, pero las deshidratadas requieren de un almacenamiento específico en un lugar fresco y seco para no verse dañadas.
Y para concluir con esta comparativa, vamos a hondar en su característica más importante: su sabor. Ese sabor umami tan personal se intensifica durante el secado de las setas deshidratadas, mientras que en las en conserva prevalece su umami en estado común.
Como ves, una vez comparadas las setas en conserva con otras de nuestras opciones preferidas, podemos concluir diciendo que todas ellas son opciones deliciosas, saludables y llenas de nutrientes.
Por lo que, es tu turno: experimenta los diferentes formatos y descubre cuál se adapta mejor a tus necesidades y preferencias culinarias.
Setas en conserva. Versatilidad en tu cocina.
Las setas en conserva son la elección perfecta para quienes llevan un estilo de vida ocupado, buscan opciones saludables o desean tener una alternativa rápida y nutritiva siempre disponible en la despensa. Ideal para aquellos con niños que aún no se manejan con soltura en la cocina, pero pueden verse en alguna situación que tenga que ser ellos los que se preparen su propia comida.
Su preparación es sencilla: abre el bote o lata, escurre el líquido conservante y añádelas a tu plato. Ya sea en ensaladas, pastas, arroces, tostadas, carnes, pescados o huevos revueltos, las setas en conserva combinan a la perfección.
Además, anímate a experimentar con recetas más elaboradas como guisos, paella, quiché, pure de verduras, salsas o porque no, unas crujientes pizzas caseras.
Dale rienda suelta a tu imaginación y experimenta con diferentes recetas para descubrir la versatilidad de las setas en conserva.
Un consejo extra: si quieres darles a tus platos un extra de sabor, no desperdicies el líquido de la conserva, ¡úsalo en tus recetas! En él, se concentran todos los aromas que potenciarán el sabor de tus preparaciones.
Razones para incluir las setas en conserva en tu día a día.
En resumen, las setas en conserva son una opción culinaria fascinante con beneficios nutricionales significativos. Su versatilidad, fácil preparación y disponibilidad constante las convierten en un ingrediente esencial en cualquier cocina, mejorando platos de manera rápida y sencilla.
Y como hemos demostrado, su método de conservación no implica que contenga aditivos ni conservantes artificiales.
¡Atrévete a explorar el mundo de las setas en conserva y disfruta de deliciosos platos sin perder tiempo en la cocina!