Cambio climático y las setas en España
Las setas son organismos sensibles a los cambios meteorológicos y cualquier alteración en su hábitat producirá alteraciones en su crecimiento.
Por ello, el cambio climático y las sequías que están afectando a nuestro país influyen de manera directa en estas especies.
A largo plazo es aún difícil estudiar sus posibles efectos ya que, todavía, no hay suficientes estudios científicos. Sin embargo, si podemos afirmar que el continuo aumento de temperaturas y de CO2 está provocando la proliferación de hongos micorrizógenos.
*La micorriza es la asociación que se produce entre las raíces de las plantas y este tipo de hongos. Una asociación que genera beneficios para ambas especies.
El cambio climático y su efecto en las épocas de setas
El aumento general de la temperatura del planeta está cambiando las estaciones tal y como las conocíamos, algo que influye directamente en las setas.
El nacimiento de las setas en otoño se retrasa debido a que tiene temperaturas más altas y menos lluvias, mientras que en la primavera el nacimiento se adelanta.
En invierno la temporada de setas se alarga, hace unos años esto era impensable, pero debido a que vivimos cada vez inviernos más suaves y con menos heladas su temporada de fructificación se hace más duradera.
Modificaciones en los lugares de crecimiento
La tendencia en el caso español es de tender un clima más cálido y seco.
Esto provocará que disminuyan los bosques atlánticos de abedules, abetos, avellanos o hayas entre otras especies. Suponemos que este cambio hará peligrar algunas especies como los rebozuelos, que crecen en estas zonas húmedas del noroeste español durante el verano.
Otras especies que estarían afectas por este cambio serían los níscalos de abeto o algunas colmenillas.
Por otro lado, esperamos un aumento del bosque mediterráneo de encinas, pinares, madroños o robles. También arbustos como la jara y la retama.
En este bosque aumentarán especies que se adapten a este medio como el gurumelo, el boletus aereus, algunos níscalos o la apreciada trufa negra.
Un fenómeno que azota cada vez más frecuentemente a nuestro país y en particular al hábitat de las setas son los incendios forestales. Dejarán a su paso un suelo pobre y destruido en el que solo crecerán hongos pirófilos, destacando las colmenillas pirófilas.
Las setas y su ayuda a la conservación del planeta
Los hongos y las setas tienen una gran importancia para la conservación de nuestro entorno y la diversidad de los bosques debido a su capacidad para adaptarse rápidamente a los cambios climáticos y disminuir sus efectos.
Su papel es fundamental en el medio ambiente, además de su valor gastronómico y cultural.
La internet del bosque o Wood Wide Web.
Los hongos son como un iceberg, lo que nos comemos es la parte superior, pero bajo el suelo se extiende un ecosistema de relaciones entre todo el ecosistema a su alrededor.
Los científicos la denominan la internet del bosque por ser una red de conexiones en la que todo está conectado entre sí.
Los conocidos boletus, oronjas, níscalos y más especies conviven en una perfecta simbiosis con la flora que existe a su alrededor. Se conectan a través de micorrizas, conectándose los hongos con las raíces de los árboles y generándose beneficio mutuo.
Los hongos incrementan la absorción de agua y diferentes nutrientes por parte de los árboles, influyendo directamente y de manera decisiva en la vida y desarrollo de los bosques. Por tanto, ante un clima más árido y seco debido al cambio climático los árboles tendrían aún más difícil su supervivencia sin la alianza con las setas. Se convierten en un elemento clave para la adaptación de los bosques a los cambios climáticos.
A su vez, los árboles aportarán a los hongos nutrientes. Unos nutrientes que el árbol genera a través de la absorción de Co2 y que ayudará a reducir sus niveles en la atmósfera mitigando los efectos del cambio climático.
Estas conexiones subterráneas constituyen una verdadera red de comunicación entre todo el bosque. Compartiendo los recursos y nutrientes, pero también como alarma en caso de ataques de agentes patógenos.
Está comprobado que los bosques que se gestionan bien producen mayor cantidad de setas y hongos comestibles sin que se comprometa la diversidad.
Por ello se regula la recolección y se conciencia a la población de la importancia de mantener el bosque en equilibrio entre diversidad y productividad. A partir de ahora, debemos mirar a las setas como el elemento gastronómico y cultural que ha sido siempre, añadiendo la importancia que tiene para la vida del planeta tal y como la conocemos.
Valorar la micología puede ser un gran favor para toda la sociedad.
Nosotros sabemos la importancia de estos pequeños seres vivos, por eso, a la hora de su recolección lo hacemos siguiendo la normativa vigente y nos aseguramos de que son aptas para su consumo. Visita nuestra tienda online y pruébalas.